Alicia Moore es el nombre original de esta estadounidense que desde los doce años ha estado presente en mis oídos con su estilo irreverente, sin tapujos y claro. Esta vez hablare de “Funhouse”, su quinto álbum de estudio, precedido del éxito del anterior trabajo “I’m not dead” y su icono “Stupid Girls”. “Funhouse” hace honor a lo que encuentras en el álbum cuando lo escuchas: es un carnaval, un desfile de payasos saltarines y malabaristas con fuego en una gran carpa de circo que tambien tiene espacio para las bailarinas derrotadas y los mimos con sonrisa desquebrajada y pobre.
Esa es la lectura que le hago a este álbum de Pink. Es un producto con dos matices centrales: la comedia y el drama. Empecemos por la comedia de “Funhouse”. El acto central de lo gracioso y animado es sin duda el primer single “So what”, melodía bulliciosa y burlesca pero genialmente diseñada para tener un espacio entre los charts y el amor del respetable que busca entre tanta comercialización excesiva de artistas una canción que sirva como arma para burlarse de situaciones de la vida del común. Me atrevería a decir que el mensaje de “So what” es quizá de los más claros y fuertes de los que Pink se ha atrevido a cantar, desligándose de los comentarios de su pareja, mostrando una cara de dolor pero una sonrisa de fortaleza. En pocas palabras, burlarse de ti mismo. Eso es “So what”.
Esa es la lectura que le hago a este álbum de Pink. Es un producto con dos matices centrales: la comedia y el drama. Empecemos por la comedia de “Funhouse”. El acto central de lo gracioso y animado es sin duda el primer single “So what”, melodía bulliciosa y burlesca pero genialmente diseñada para tener un espacio entre los charts y el amor del respetable que busca entre tanta comercialización excesiva de artistas una canción que sirva como arma para burlarse de situaciones de la vida del común. Me atrevería a decir que el mensaje de “So what” es quizá de los más claros y fuertes de los que Pink se ha atrevido a cantar, desligándose de los comentarios de su pareja, mostrando una cara de dolor pero una sonrisa de fortaleza. En pocas palabras, burlarse de ti mismo. Eso es “So what”.
Siguiendo con el lado sonriente del álbum tropezamos grandes temas musicales como “Bad Influence” y “Funhouse” que son mas con el tema de un circo a diferencia del resto del álbum que también da espacio a canciones rockeras a las que Pink nos tiene acostumbrados como “It’s all your fault”, canción llena de odio, rencor y miedo ante el producto de una mentira y ante las injusticias de una relación de pareja. Eso es lo burlesco y feliz.
Y esta el drama, lo mejor del álbum. El show central de la tristeza y melancolía se lo lleva “Glitter in the air”, a mi juicio la mejor canción del álbum e incluso la balada mas desgarradora y seria de la carrera de Pink, sin mencionar que es de mis canciones preferidas y de las que mas escucho a diario. “Glitter in the air” es una canción de amor pero con condiciones. Es ponerte en alerta diciéndote “Hey, yo te amo, pero necesito que tu también lo hagas”. Aunque la voz de Pink muestra a primera impresión que es más de saltos y brincos, este tema esta compuesto por una solidez y claridad vocal que, si usted escucha, le mostrara lo que un piano y una letra sencilla pueden transmitir en los oídos de los demás.
Acá "Glitter in the air":
Siguiendo con la línea dramática, “Funhouse” tiene temas tan igual de geniales como “Mean”, “I don’t believe you” y “One foot wrong”, tan bien producidos gracias al acompañamiento de Pink. El acto final del álbum: “Sober”, un tema oscuro y sombrío que guarda un lineamiento perfecto con lo “borracha” que Pink intenta estar para olvidar las penas y los malos tiempos, perdida entre un incomodo ambiente fiestero que no sirve mas que agrandar la herida del desamor.
“Funhouse” no es un álbum. Es un lugar. Un lugar creado para disfrutar de dos ambientes: si estas pasando por buenos momentos o por el contrario quieres escapar de lo que te hace infeliz. La drama y la comedia compilados en 13 temas y un bonus track, perfectos para compartir en tu pc o reproductor de música en esos momentos en que la bipolaridad te aceche a la mitad de la noche.
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