Cuenta saldada: T.H.E. le cumplió a Barranquilla

Cuando algo planeado sale como no lo esperabas, no soy partidario de brindar segundas oportunidades. Pero debo decir que lo que viví con The Hall Effect en Barranquilla durante su concierto en SoHo Lounge Club fue el pago de la deuda que tenían pendiente con este servidor al irse del parque Simón Bolívar, cabizbajo, ese frío y lluvioso 5 de julio de 2010  en la capital de la República, luego de hacer fila por más de dos horas para ingresar a Rock al Parque y al final no ver ningún éxito interpretado por la banda, ante la masa de vestimentas negras que agolpaban el escenario sedientas de rock.

Su presentación en Barranquilla, como parte de su "Spread T.H.E. Word" Tour, más que impecable, fue generosa con el pasado y su Fan Base, que escuchamos en poco más de una hora un completo recorrido por su primer álbum y los nuevos sonidos de su reciente producción discográfica. Algo no me queda duda: estos chicos son toda una sensación en vivo. La voz de Oscar, la guitarra de Charry, el poder del bajo de Douglas y la destreza de Andrés en la batería hizo conexión inmediata con los asistentes cuando iniciaron con "April" luego de un corto Intro. 

Pasaban los temas y el nivel y fuerza aumentaba, tras los vítores del respetable, compusto en su mayoría de fanáticos cuando se dieron a conocer a nivel nacional. Lo que no esperaba era el anuncio del vocalista de la banda al mencionar algunos tweets realizados con anterioridad sobre que temas queríamos escuchar, teniendo la suerte de ser mencionado y complacido con, en mi opinión, la mejor canción que tiene la agrupación: "Unpure". 

No puedo decir lo que pasó por mi mente en ese momento. No sabía si cantar, si observar el performance o hacer ambas cosas a la vez, dejandome llevar por la crudeza lírica de la canción que representa una triste carta hacía aquella persona que llega a tu vida de manera inesperada y que se va sin avisar, sin dejar rastro ni sombra, de la misma manera en que llegó. 


Por supuesto, más exitos hacen parte del repertorio de la banda, como "Become", la rockerísima "Trip Dog", las guitarras magistrales de "Fading" y la más esperada de la noche, la canción con la que se dieron a conocer en la difícil esfera nacional musical, "Aim at Me" (que también disfruté al máximo porque fue la primera composición del grupo que escuche en la radio de Barranquilla)

Al finalizar el show en sus camerinos agredecí a cada uno de ellos el enorme detalle al interpretar mi canción favorita y Oscar, muy gentil, me regaló su más reciente producción autografiada "para el viejo Jairo" que guardaré con mucho aprecio.

Fue una noche genial! Me doy por bien servido y con la confianza que estos chicos tendrán un amplio reconocimiento en Colombia gracias a su talento y su entrega en el escenario, pero además me retiré satisfecho al saber que, por esta vez, las segundas opotunidades se deben brindar sin pensarlo. Más aún si se trata de The Hall Effect que bastante me han acompañado en la banda sonora de mi vida.

Nota Mental: Aplausos para Ciudad Q, una de las bandas teloneras del show de anoche. Buena sincronización y mucho talento de todos sus integrantes, en especial de Jorge Qba con su particular voz. Me gustó su propuesta y espero pronto eco de sus interpretaciones en las emisoras locales.