De luces apagadas, de sentimientos por el suelo..
de frío desolador, de piel confusa...
de pupílas dilatadas con fijación por el techo...
de pies descalzos rozando los bordes del abismo...
de rodillas descubiertas ante la oscuridad...
de oídos quisquillosos que se resisten a escuchar el silencio...
de ovejas rebeldes decididas a quedarse de mi lado...
de fuerzas en espiral, de luces tenues que se burlan de la luna...
de todo aquello entre lo hecho, lo incompleto, lo vacío y lo lleno...
de mirar con desespero la maldita aguja del reloj
de aprender a contar, restar, dividir, pero nunca multiplicar
de miedos y fantasías, de truenos y volcanes, de aspas flotantes en mi espacio sideral..
de morir, de vivir, de las cenizas nunca volver y del polvo jamás carne ser...
de frío desolador, de piel confusa...
de pupílas dilatadas con fijación por el techo...
de un idiota confundiendo el cielo y cantando en coro aquella melodía desgraciada e ínfima...
aquella que lo hace ser más idiota, más débil todavía...